Un rebrote de incendios avanza por los Esteros

Se trata de lugares de difícil acceso, por lo que los brigadistas de la “guardia de cenizas” realizan trabajos de contención.

Loreto y el paraje Galarza mantienen focos de incendios en los Esteros del Iberá. Se están quemando los embalsados que se secaron y que no tuvieron impacto de las últimas lluvias.

Según la coordinación oficial de la emergencia, estos lugares son de difícil acceso, por lo que se espera que ocurran precipitaciones a partir de mañana, para apagar finalmente el fuego. Las tareas en estos lugares son de contención de los incendios.
Según el Servicio Nacional de Manejo del Fuego (Snmf) este viernes trabajaron en un foco activo en la localidad de Alvear, en tanto que pudieron contener otros seis incendios en San Miguel, Concepción, Carlos Pellegrini, Santo Tomé, General Paz y Mburucuyá.
El fuego se desató en una zona de embalsados en inmediaciones de paraje Galarza, en un área insegura para los brigadistas. “Ese incendio tiene un desarrollo de unos cuatro o cinco días. Se había aplacado por la lluvia pero como está quemando embalsado, el fuego continúa por debajo y ha tenido un rebrote”, dijo a La Red Corrientes, el subdirector de Defensa Civil de Corrientes, Bruno Lovinson.

 

“No reviste un peligro, no tiene carácter de importancia, más allá de que pasa con el ecosistema, pero no tenemos forma de combatirlo. Hace un par de días intentó ingresar una brigada por medio aéreo pero no hay seguridad en el terreno para que nuestros brigadistas estén ahí, así que técnicamente es muy difícil poder controlarlo. Esperamos en ingreso de lluvias, que podría ser entre el domingo, lunes o martes y después el jueves de la semana que viene para aplacar estos puntos calientes”, agregó.
El funcionario comentó además que en las imágenes satelitales se observa que hay un control en más del 90% de los incendios activos dentro de la provincia. “Esto nos da tranquilidad en el desarrollo de los focos activos, pero en las últimas 48 horas han aparecido incendios nuevos, ninguno de ellos con carácter que revistan de gravedad pero nos mantienen alerta”, insistió.
“Estamos con un déficit de lluvias de más de tres o cuatro años y el déficit va mucho más allá todavía, entendiendo que Corrientes tiene aproximadamente entre 1800 y 2500 milímetros por año y en el último tiempo no llegamos a superar los 400 milímetros. Esto es el desencadenante del desastre ambiental que estamos viviendo”, concluyó.